DBF 30/08/2008 - Caña, caña y caña. El concierto de los australianos The Presets de ayer en Barcelona presentando su último trabajo Apocalypso fue una inyección continua de tecno que no tuvo ningún momento de tregua. Desde el momento en que el dúo apareció en el escenario de la sala 1 de Razzmatazz (aunque estaba programado que lo hiciera en The Loft) empezó a derrochar energía con melodías repletas de ritmos sintetizados hasta los topes.
Los únicos instrumentos que sonaron en directo fueron la batería del meticuloso Kim Moyes y la voz de Julian Hamilton, que apareció ante los asistentes con una americana de color rosa nube de golosina y muchas ganas de hacer bailar. La locura llegó cuando tocaron Talk Like That. Solo les faltó pregrabar también los agradecimientos, pero lo cierto es que el concierto dio en el clavo e hizo enloquecer a todo aquel que estuvo allí y que dejó de hacer lo que estaba haciendo para dejarse llevar por esos dos locos de la psicodelia preproducida.
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