CPB 9/6/2011 - Tras el nombre de Connan Mockasin se esconde un joven neozelandés afincado en Londres con cara de no haber roto un misero plato en su vida. Parece pues, como mínimo sorprendente, que semejante criatura angelical haya sido capaz de parir uno de los trabajos más sorprendentes de los últimos meses (o quizá más tiempo). Porque este “Forever Dolphin Love” hay que tomárselo muy en serio.
Suena a tópico pero, pese a no hacer ningún esfuerzo aparente por esconder sus infinitas influencias, la suma de los factores dan un producto tremendamente original. Nos invade esa sensación de estar escuchando algo diferente a lo que tenemos acostumbrados nuestros oídos día tras día; algo que tiene ganas de destrozar el statu quo de la música de este comienzo de siglo. Y lo más gratificante: estamos convencidos que hay margen de mejora y que esto es solo un adelanto de lo que Connan Mockasin nos tiene preparado en un futuro.
La canción que da título al disco sintetiza a las mil maravillas el ADN del disco. Largas intros instrumentales, cambios inesperados y desconcertantes y variaciones estilísticas que viran sin pudor alguno del free-jazz al krautrock, todo ello comandado por la agudísima voz de Connan y un aura de psicodelia digna de un encuentro entre Syd Barrett y unos Beatles hasta el culo de LSD.
Lástima que llene demasiado minutaje con excesivos paisajes ambientales (muy bien logrados, eso sí) y echemos en falta más melodías, más estribillos y más canciones redondas como It’s choade my dear. Por cierto, la edición del disco viene con un directo para alargar el viaje hasta donde a Connan le apetezca. Pónganse cómodos, esto no ha hecho más que empezar.
Conciertos | Discos | Noticias | Entrevistas | Agenda | BiginnerTV