Me and the bees

"¿Hacer la canción pop perfecta? Eso ya lo han hecho muchos"

LLM 29/12/2010 - La gente de Me and the Bees nos citan una tarde cualquiera en su local de ensayo en Barcelona. Aunque ellos insisten en lo desvencijado del lugar, a nosotros nos parece que está más que bien. Sus componentes disfrutan de un gran momento a nivel musical: tocaron en septiembre en el BAM, afrontan una apretada agenda de bolos en Catalunya y en el resto de España, y su primer disco “Fuerza Bien” está gozando de buena aceptación tanto para el público como para la crítica.

Se les nota relajados y felices. Es por eso que reciben la primera pregunta de la entrevista con carcajadas y no con miradas asesinas, cuando les preguntamos si no creen que la voz de Esther es una mezcla entre Russian Red y Leonor Watling. “Estas chicas no son referentes para mí, la voz me sale así y yo creo que es bastante carajillera”, nos explica Esther, mientras que Eli se prepara para atacar: “Al menos hemos conseguido que no cante sobre pajaritos ni sobre patos”.

Las letras

Pues casi lo consiguen. Las letras de su primer álbum son agridulces en su mayoría, melancólicas y divertidas, en ocasiones. Aún así, el nombre del disco refleja positivismo. Carlos, Carlotto para “sus” chicas, nos cuenta que se les ocurrió durante la grabación del álbum. “Es la traducción de la coletilla força bé que utilizan los hermanos Santi y Víctor (La Castanya) después de grabar los temas”. Se lo pasaron tan bien en el estudio que decidieron bautizarlo de esta forma.

La música

Ellos mismos reconocen sus limitaciones técnicas y su sonido destartalado se ha convertido en marca de la casa, por lo que casi se han visto obligados a acuñar el lema “abajo el virtuosismo”, con el que dan la bienvenida a sus fans que se acercan por su myspace. Da la impresión de que desean a toda costa hacer música sencilla y cercana. Esta intención queda corroborada en las palabras de Carlos: “¿Hacer la canción pop perfecta? Eso ya lo han hecho muchos”, afirma, y recurre al tópico “esto lo hacemos por diversión”.

Confiesan no estar influenciados por ningún grupo en concreto, es más, insisten en que no les gustaría que los encasillasen bajo ninguna etiqueta en concreto. Pero el mundo de la prensa musical insiste en nombrar a Breeders, a Pavement, e incluso a The Go-Beetwens para referenciar su música. Y ellos, si tuvieran que elegir, preferirían parecerse a grupos que no se toman muy en serio a sí mismos, de esos que, según Carlos, “hacen cosas feas porque hace gracia, es fresco y divertido”.

Ah, y de The Softies lo único que admiten haberles robado es el título de la canción que bautiza al grupo. “Simplemente nos hizo gracia el nombre y surgió como puede surgir cualquier nombre de cualquier banda de música”, concluye Esther.

Los conciertos

Su primer pequeño gran concierto fue en el Primavera Club de 2009. Tocaron porque Abel Suárez, más conocido como dj Coco, escuchó la maqueta que Esther le entregó un día y decidió que estos chicos encajaban en el cartel del festival. Un año después, es el BAM el que los incluye en su programación. “Nos lo pasamos bien tocando en cualquier lado y ahora mismo lo que más deseamos es viajar y tocar en sitios donde nunca hemos tocado”, confiesa Eli, mientras le brillan los ojos sólo de imaginárselo.

La anécdota

Antes de dar por concluida la entrevista, se nos ocurre preguntarles qué llamada telefónica les cambiaría la vida en este momento. He aquí las respuestas:

- Carlos: Michael Jackson, aún me pregunto si sigue vivo… (risas)
- Verónica: Una conversación con Mark Oliver Everett (Eels), porque su libro me está dejando flipada.
- Esther: Me conformo con que me llame cualquier colega para ir a hacer una birra.

Me and the Bees son Esther Margarit (voz y percusión), Eli Molina(guitarra y coros), Verónica Alonso (batería) y Carlos Leoz (guitarra y coros).

Foto: David Brito