Destroyer

Bikini

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H 4/7/2011 - El pasado 21 de Junio, Barcelona recibió el directo del que ya podríamos decir que es uno de los álbumes del año. Sí, señores y señoras, esta vez Dan Bejar ha conseguido el reconocimiento merecido, y sin estar detrás de The New Pornographers. Por fin, la palabra Destroyer, ya está en boca de muchos. Bien.

Kaputt (Merge 2011) era la excusa para girar nuevamente por la península. A diferencia de su última visita en el 2007, Dan Bejar no vino sólo, se acompañó de 7 músicos más para poder ofrecer un show al mismo nivel de su último álbum. Porque Kaputt es un álbum redondo de pop. Pop de antaño, para los que somos jóvenes. Aquel pop de los años 70 y 80, llenos de vientos. Pop con elegancia. Y así fue su concierto en la sala Bikini. Una gala.

Dan Bejar no es el alma de la fiesta, si más no, no lo fue ese día. Le faltaba chispa y conexión con el público. Pero su concierto fue de nota alta. Repasó, casi íntegramente, todo este álbum. He de decir que Kaputt no me dijo nada durante la primera escucha. Sí, soy un enamorado del Destroyer’s Rubies (Merge 2004), y de los anteriores discos de Dan. Pero después de darle al play por segunda vez, vi que otra vez había hecho algo muy grande. Entendí las buenas críticas y el por qué, con este último disco, se empieza a hablar más de este proyecto. Pero en su concierto eché de menos esas canciones más antiguas. Así que, como entenderán, no me conformé con sólo escuchar It's Gonna Take an Airplane (Your Blues, Merge 2004), 3.000 Flowers o Painter in your Pocket (estas dos últimas del Destroyer´s Rubies).

Así pues el setlist lo terminaron de formar las canciones del Kaput. Abrió con la bonita Chinatown, poniendo todas las cartas encima de la mesa. Y no, el concierto no decayó a nivel musical. Quizás en algunos momentos, los vientos (trompeta y saxo) saturaban un poco el ambiente, pero no podían faltar, pues son, en muchas de estas canciones, instrumentos protagonistas o claves para este nuevo registro de Dan Bejar

Quizás si hubiera alternado las canciones de los anteriores discos con la misma facilidad que iba bebiendo de cada una de las tres bebidas que tenía encima del escenario, el concierto hubiera sido para enmarcar. De esos que guardas en algún archivo de tu cabeza. Aquellos que, durante años, la gente sigue hablando. Pero no, no fue así. Aún así, el concierto de Destroyer en la Bikini, creo que tampoco lo olvidaremos, pues Dan se merece el apellido de genio, por lo que hace y como lo interpreta. Ahora, a la espera de que regrese, y porque no, para hacer un concierto de repaso de toda su trayectoria, que no es corta.